La meta y la teoría de las restricciones
Toda organización debe tener al menos una meta, un objetivo en función del cual se establecen las prioridades de la empresa y el punto de partida para las iniciativas y las decisiones gerenciales que se tomen; de manera tal, que los logros obtenidos están sujetos a las restricciones de la organización. Es decir aquellos aspectos […]

Toda organización debe tener al menos una meta, un objetivo en función del cual se establecen las prioridades de la empresa y el punto de partida para las iniciativas y las decisiones gerenciales que se tomen; de manera tal, que los logros obtenidos están sujetos a las restricciones de la organización. Es decir aquellos aspectos intrínsecos o foráneos que limitan el alcance de dicha meta.

Las restricciones del sistema determinan las posibilidades de obtener más de la meta de la organización.Las restricciones pueden ser de tres tipos: 1. Físicas: Cuando la limitación pueda ser relacionado con un factor tangible del proceso.2. De mercado: Cuando el impedimento está impuesto por la demanda de los productos o servicios.3. De políticas: Cuando la empresa ha adoptado prácticas, procedimientos, estímulos o formas de operación que son contrarios a su productividad o conducen (a veces inadvertidamente) a resultados contrarios a los deseados.

La mejora continua basada en la teoría de las restricciones establece que los esfuerzos de mejora deben enfocarse en:

1. Identificar la restricción: Las restricciones no son los síntomas de no usar adecuadamente el sistema y por ende no deben confundirse. Las restricciones son limitadas (puede usarse la metodología de los 5 porqués o el diagrama de Ishikawa para su definición).
2. Decidir como explotar las restricciones: recuerde que las restricciones deben definirse en función de la meta de la organización y a partir de allí se debe generar el análisis.
3. Subordinar todo lo demás a la decisión anterior: Es de recordar que la organización funciona como un todo y no como unidades de negocio separadas por lo que una vez definida la meta y las restricciones; en función de esa meta, la subordinación debe hacerse como un todo interrelacionado a nivel de organización.
4. Elevar las restricciones de la empresa: Elevar las restricciones es generar un aumento en la capacidad limitante de las restricciones; es decir, disminuir el diferencial entre la restricción y la meta.
5. Retomar el paso 1: como toda iniciativa de mejora continua, la teoría de las restricciones también se basa en el circulo de mejora continua de Demming; en función de los cual una vez solucionado un problema, hay que buscar el siguiente para aumentar el rendimiento, la rentabilidad o “acercarnos mas a la meta”

La teoría de las restricciones (TOC) ha generado una metodología de mejora continua denominada: “procesos de pensamiento” en donde para definir las restricciones y trabajar sobre ellas se debe generar pensamiento lógico acerca de:
1. ¿Qué cambiar?
2. ¿Hacia qué cambiar?
3. ¿Cómo provocar el cambio?